Abstract
La reactivación de la actividad productiva, comercial y de los servicios, junto con la celebración de centenares de acuerdos salariales en negociaciones paritarias entre empresas y sindicatos, no resultaron suficientes argumentos para posibilitar un reparto más igualitario de la riqueza. Sólo a través de las políticas sociales del Gobierno los índices oficiales pudieron mostrar un avance en esa orientación en el agregado nacional, por el impacto que tuvieron sobre los presupuestos de las familias de menores recursos, y en particular sobre los trabajadores que se desempeñan en la informalidad, según IDELASUCES detectó al procesar los datos del INDEC de Distribución Funcional del Ingreso Asalariado.