Abstract
En este trabajo procuraré demostrar que en nuestro Derecho, contrariamente a la tendencia que se advierte en el Derecho Comparado, la libertad de testar, a través de las sucesivas reformas que ha experimentado el Código Civil, ha ido diminuyendo gradualmente, en términos tales que a luz de la ley 19.585 de 26 de octubre de 1998, bajo ciertos supuestos, queda reducida a la cuarta parte de los bienes del causante.